Esta noche de san Juan la tenemos que hacer las mas especial. la noche de las brujas tiene que convertirse, en un cambio para todo en el mundo y nosotros mismos.
Voy a contar una historia de la antigüedad.
Había una bruja que vivía entre familia, muy religiosa que tuvieron una niña que creía mucho en dios, pero no como los que su padres hablaban, y desde que era pequeña la niña hablaba y decía cosas que luego pasaba. Sus padres le decía que estaba loca y que dejara de decir eso porque la iban a meter en el manicomio. La pobre no entendía nada. a los 15 años la llevaron a casa de su abuela materna, ella la ayudo a entender.
- La abuela- Lo que te pasa es que eres una brujita
-ella- No digas eso mis padres hablan muy mal de ellas.
la abuela empezó a enseñarle que hacían las brujitas. y el bien que muchas de ellas tenían y que creían en dios. eran curanderas y ayudaban a las personas a mejorar. Pero le explico que también había brujas que trabajaban para la oscuridad.
la niña entendió lo que le pasaba, y cuando cumplió 16 años la abuela le hizo el mejor regalo, en el día de San Juan la llevo a un aquelarre de brujas blancas, ese día fue muy feliz para ella. le enseñaron costumbres, pócimas, y había mas niñas de su edad. y jugo y se divirtió, ya nunca se sintió rara, era feliz y a partir de entonces, solo hablaba de esto delante de ellas. todas las tardes se reunían, y le enseñaban a ser una buena bruja, le enseñaron a leer bien, hacer medicinas.
Es curioso esa bruja se llamaba Luna, que fuerte verdad.
Uno de sus padres se puso enfermo, y ella a pesar de no haberle visto mas le curo, a partir de ahí empezaron a respetar lo que su hija era.